Cómo cuidar tus joyas de Ambrosia
Los materiales que utiliza Ambrosia son de la mejor calidad y seleccionamos a mano cada piedra para crear la colección perfecta para usted. Con el cuidado adecuado, sus joyas pueden mantener su brillo y resplandor.
- Utilice únicamente el limpiador de joyas Ambrosia, ya que otros productos son demasiado agresivos y pueden quitar los acabados de los materiales y dañar las piedras preciosas. No olvide consultar nuestro kit para quitar el deslustre de las joyas de plata esterlina.
- Guarde y viaje con sus joyas en nuestros joyeros o estuches de viaje para ayudar a prevenir rayones en las piedras preciosas.
- Siempre ofrecemos servicios de limpieza e inspección gratuitos para todas nuestras joyas en nuestro estudio. Recomendamos que cada 6 meses un profesional limpie e inspeccione sus joyas finas.

Siga estos sencillos pasos para ayudar a que sus joyas luzcan lo mejor posible año tras año.
- Quítese las joyas antes de ducharse, limpiar, nadar y realizar actividades que requieran mucho esfuerzo. Estas actividades pueden decolorar o dañar sus piedras preciosas, diamantes y metales.
- Aplique toda laca para el cabello, lociones, maquillaje y perfumes antes de usar sus joyas, ya que los productos de belleza pueden crear una acumulación en las joyas y hacer que se vean opacas y sucias.
- No use joyas mientras trabaja con productos químicos, productos de limpieza, blanqueador, cloro, agua salada o desinfectante para manos, ya que estas soluciones pueden secar las piedras preciosas y dañar el oro o la plata.
- Nuestras joyas de drusa son únicas porque tienen una superficie irregular debido a que sus cristales se forman de forma natural en el interior de una geoda. Estos cristales se forman juntos como una sola piedra y son bastante duraderos, pero si no se usan con cuidado, estos cristales pueden decolorarse debido a los productos de belleza o dañarse por el uso o el almacenamiento brusco. Trate estas deslumbrantes piedras preciosas de manera similar a los ópalos y las turquesas.
Aunque los diamantes son las piedras preciosas más duras, es posible que se rayen, se astillen o se agrieten. Recomendamos que sus joyas sean lo último que se ponga antes de salir por la puerta y lo primero que guarde al regresar a casa. Con el cuidado adecuado y un mantenimiento regular, sus joyas mantendrán su brillo.